Viajar a Roma es una experiencia única que muchos sueñan con realizar. La ciudad eterna, con su rica historia, su impresionante arquitectura y su deliciosa gastronomía, atrae a millones de turistas cada año. Sin embargo, una pregunta frecuente es ¿cuánto dinero necesito para visitar Roma? En esta guía completa de presupuesto, desglosaremos todos los gastos que debes considerar para planificar tu viaje sin sorpresas.
Transporte: Cómo llegar y moverse por Roma sin gastar de más
Contenidos
- Transporte: Cómo llegar y moverse por Roma sin gastar de más
- Alojamiento: Opciones para todos los presupuestos en la ciudad eterna
- Comidas: Disfrutando de la gastronomía italiana sin gastar una fortuna
- Actividades y entradas: Aprovechando al máximo la oferta cultural de Roma
- Presupuesto total estimado para tu viaje a Roma
El primer aspecto a considerar en tu presupuesto es el transporte. Si viajas desde España, tienes varias opciones para llegar a Roma. Las aerolíneas de bajo coste como Ryanair y Vueling ofrecen vuelos directos a precios muy competitivos. Por ejemplo, un vuelo desde Madrid o Barcelona puede costar entre 50 y 150 euros ida y vuelta, dependiendo de la anticipación con la que reserves y la temporada en la que viajes.
Una vez en Roma, moverse por la ciudad puede ser económico si utilizas el transporte público. El metro, autobuses y tranvías cubren la mayoría de las áreas turísticas. Un billete sencillo cuesta 1,50 euros y es válido por 100 minutos, permitiéndote cambiar de medios de transporte durante ese tiempo. Si planeas utilizar mucho el transporte público, puedes optar por un abono diario por 7 euros o un pase de 3 días por 18 euros, lo cual te ayudará a ahorrar en desplazamientos.
Otra opción para explorar la ciudad es a pie. Muchas de las atracciones principales están relativamente cerca unas de otras, y caminar por las calles de Roma es una experiencia en sí misma. Sin embargo, si prefieres mayor comodidad, los taxis y servicios como Uber están disponibles, aunque son más costosos. Un trayecto promedio en taxi dentro del centro puede costar entre 10 y 15 euros.
Alojamiento: Opciones para todos los presupuestos en la ciudad eterna
El alojamiento es uno de los gastos más significativos en cualquier viaje. En Roma, afortunadamente, existen opciones para todos los bolsillos. Los albergues o hostales son ideales para quienes buscan ahorrar en alojamiento. Una cama en un dormitorio compartido puede costar desde 15 hasta 35 euros por noche, dependiendo de la ubicación y las comodidades ofrecidas.
Si prefieres más privacidad, las pensiones y hoteles de 2 o 3 estrellas ofrecen habitaciones dobles desde 50 euros por noche. Estos establecimientos suelen estar bien ubicados y ofrecen servicios básicos. Para una experiencia más lujosa, los hoteles de 4 y 5 estrellas pueden costar entre 150 y 400 euros por noche, ofreciendo instalaciones de alta calidad y ubicaciones privilegiadas cerca de los principales puntos de interés.
Otra alternativa es alquilar un apartamento a través de plataformas como Airbnb. Esto puede ser especialmente económico si viajas en grupo o planeas una estancia más prolongada. Los apartamentos pequeños en el centro de Roma pueden costar alrededor de 70 euros por noche, y contar con cocina te permitirá ahorrar en comidas al prepararlas tú mismo.
Comidas: Disfrutando de la gastronomía italiana sin gastar una fortuna
La gastronomía romana es uno de los placeres que no puedes dejar de experimentar. Desde pizzas y pastas hasta helados y cafés, las opciones son innumerables. Pero, ¿cuánto debes presupuestar para comer en Roma?
Para desayunar, los italianos suelen tomar un café y un cornetto (un tipo de croissant). Puedes encontrar este combo en cafeterías locales por alrededor de 2 o 3 euros. Es una forma auténtica y económica de comenzar el día.
A la hora del almuerzo, los restaurantes turísticos pueden ser caros, pero si buscas donde suelen comer los locales, encontrarás menús del día por entre 10 y 15 euros que incluyen plato principal, bebida y, a veces, postre. Las trattorias y osterias son establecimientos tradicionales que ofrecen platos caseros a precios razonables.
Si prefieres algo rápido, los puestos de pizza al taglio (pizza al corte) ofrecen porciones generosas por 3 o 4 euros. También puedes probar los famosos suppli, unas croquetas de arroz típicas de Roma, por alrededor de 2 euros cada una.
Para cenar, puedes optar por un restaurante de gama media donde un plato principal ronda los 12 a 20 euros. Si quieres probar un buen vino italiano, considera que una copa cuesta entre 4 y 6 euros. Para ahorrar en bebidas, puedes pedir agua del grifo (acqua del rubinetto), que es gratuita y apta para el consumo.
No olvides darte un gusto con un auténtico gelato. Los helados artesanales cuestan entre 2 y 4 euros, y son el postre perfecto para culminar el día.
Actividades y entradas: Aprovechando al máximo la oferta cultural de Roma
Roma es un museo al aire libre, y muchas de sus maravillas arquitectónicas pueden disfrutarse sin costo alguno. Sin embargo, algunas atracciones emblemáticas tienen tarifas de entrada que debes considerar en tu presupuesto.
El Coliseo, por ejemplo, es una visita imprescindible. La entrada combinada que incluye el Foro Romano y el Palatino cuesta 16 euros. Para evitar largas colas, es recomendable comprar las entradas en línea con antelación por un pequeño recargo.
Los Museos Vaticanos y la Capilla Sixtina también son puntos destacados. La entrada general cuesta 17 euros, y es aconsejable reservar en línea para evitar esperas. Ten en cuenta que el último domingo de cada mes la entrada es gratuita, pero las filas pueden ser muy largas.
La mayoría de las iglesias, como la Basílica de San Pedro, son de acceso gratuito. Sin embargo, subir a la cúpula de San Pedro tiene un costo de 8 euros si utilizas las escaleras, o 10 euros si prefieres el ascensor hasta cierto punto y luego continuar a pie.
Para quienes desean profundizar en la historia y el arte de Roma, una visita guiada puede ser muy enriquecedora. Los precios de los tours varían, pero puedes encontrar opciones desde 20 hasta 50 euros, dependiendo de la duración y el tipo de experiencia.
Además, considera adquirir la Roma Pass, una tarjeta turística que por 48 horas cuesta 32 euros e incluye entrada gratuita a dos museos o sitios arqueológicos, uso ilimitado del transporte público y descuentos en otras atracciones. Si planeas visitar varios lugares con costo de entrada, esta puede ser una opción rentable.
Por último, no olvides simplemente pasear por plazas como la Piazza Navona, la Fontana di Trevi o el Panteón, que no tienen costo y son algunos de los lugares más emblemáticos de Roma.
Presupuesto total estimado para tu viaje a Roma
Sumando todos los gastos anteriores, podemos hacer una estimación del presupuesto necesario para disfrutar de Roma. Ten en cuenta que estos costos pueden variar según la temporada, la anticipación con la que reserves y tus preferencias personales.
Vuelos desde España: 100 euros (promedio ida y vuelta)
Alojamiento: 50 euros por noche (hotel de gama media)
Comidas: 30 euros al día (desayuno, almuerzo y cena en lugares económicos)
Transporte en la ciudad: 7 euros al día (abono diario)
Entradas y actividades: 20 euros al día (visitando una atracción de pago diaria)
Para un viaje de 5 días, el cálculo sería aproximadamente:
Vuelos: 100 euros
Alojamiento: 250 euros (5 noches x 50 euros)
Comidas: 150 euros (5 días x 30 euros)
Transporte: 35 euros (5 días x 7 euros)
Actividades: 100 euros (5 días x 20 euros)
Presupuesto total estimado: 635 euros
Este monto es un estimado para un viajero que busca comodidad sin lujos excesivos. Si optas por alojamientos más económicos, como hostales, y controlas tus gastos en comidas y actividades, puedes disfrutar de Roma con un presupuesto más ajustado. Por otro lado, si buscas experiencias más exclusivas, deberás aumentar tu presupuesto en consecuencia.
En conclusión, viajar a Roma puede adaptarse a diversos presupuestos. Planificando con anticipación y haciendo elecciones conscientes sobre dónde gastar tu dinero, puedes disfrutar de todo lo que la ciudad eterna tiene para ofrecer sin que tu bolsillo sufra demasiado.


